21 de septiembre de 2007

Bienvenidos al Miraflores

Es día de partido. El equipo entrenó ayer por la tarde para relajar los músculos después de un viaje en avión que suele ser bastante incómodo para hombres tan altos. Hoy, sin embargo, no pisarán la pista hasta poco antes del encuentro, aunque tendrán las típicas charlas técnicas para prepararlo. Pero me gustaría que la gente viera que la Liga LEB no es ni Zaragoza ni el Príncipe Felipe. Hay mucho más y, en la mayoría de los casos, sorprendería a más de uno. Sin ánimo de ofender os presento el pabellón de Miraflores. Después de haberlo visitado varias veces tiene su encanto, pero hay que reconocer que resulta pequeño, viejo, incómodo, aunque a la medida de esta isla tan tranquila como verde, por su abundante vegetación.



Está dentro de un complejo deportivo amplio y con muchas instalaciones, pero el Miraflores llama la atención en una categoría como esta. La puerta da acceso directamente a la cancha, la tribuna es de bancos corridos de madera, que dan una enorme sensación de antigüedad; la capacidad rondará los mil espectadores tirando por lo alto, el parquet está levantado en algunas zonas y los focos reflejan cuando vas a tirar un triple. Insisto, que no se enfade nadie, pero quería mostrar que no todo es tan fácil y tan cómodo en la LEB como cuando juegas en casa ante 10.000 personas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Jeje, está bien. Si casi es más grande el pabellón de los Escolapios de Zaragoza. Es como volver a jugar en aquellas canchas de colegio. Un saludo.