El CAI volvió a ser ayer el equipo que encandila, ese que está llamado a pelear por el ascenso directo hasta el final, ese que juega un baloncesto de muchos kilates, pero esta vez no dejó escapar la oportunidad y logró el premio del triunfo.
Anoche se vio a un equipo concentrado, un conjunto muy agresivo en defensa, a un grupo que jugaba los ataques con criterio y sobre todo a una plantilla hipermotivada que no iba a dejar que le ocurriera o mismo que ante el Bruesa.
El CAI volvió a completar un auténtico partidazo en el que resultó vital la participación de los secundarios. Los Quinteros, DP o Victoriano rindieron a su altura, pero los teóricos reservas apuntalaron la victoria. La enorme solidez que dieron Higgins y Starosta en la pintura desquició a los gallegos, la defensa y los puntos de Óscar González o Howard Brown ampliaron la renta, y el CAI se mostró de nuevo como una máquina enorme y muy bien engrasada.
Pero era su deber, ya que de no haber ganado las cosas pintarían bastante mal. Ahora hay que seguir en esta línea, puesto que el resto no falla y el ascenso directo solo estará al alcance de uno.
24 de febrero de 2008
Otro partidazo, pero esta vez con premio
Publicado por Enrique Coscolín a las 12:06
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1 comentario:
Como dice la canción: Y por fin he encontrao el camino que ha de guiar mis pasos...
21 jornadas, 840 minutos, para certificar, si es que no estaba claro, que todo se reduce a: si defendemos a tope no ganamos, barremos, a todos; si no, perdemos o sufrimos.
Que no se nos vuelva a olvidar, por favor.
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