22 de mayo de 2008

Curiosidades de un ascenso

El CAI ya está en la mejor liga de Europa. Ha sufrido, pero finalmente lo ha conseguido y lo ha podido celebrar. Precisamente en esos instantes de las celebraciones y posteriores actos se han vivido situaciones más que curiosas. Aprovechando mi presencia en muchos de esos momentos voy a relatar alguno de los más llamativos.
Para empezar, y a nadie se le escapó, el feo gesto de ni siquiera nombrar en las celebraciones del pabellón al joven Blaz Cresnar, quien durante muuchos meses perteneció a la primera plantilla. Mal, muy mal, ya que el chaval no se sintió muy cómodo y ni siquiera asistió a la fiesta posterior organizada por el club.
Ese mismo día se repartían las pequeñas copas conmemorativas del título a cada uno de los jugadores. Pues los ladrones llegaron incluso al vestuario del CAI, ya que al día siguiente el trofeo de José Antonio Rojas había desaparecido de su taquilla. Ya se sabe lo que pasa con las celebraciones, mucha gente dentro del vestuario y...
Bueno, el alero andaluz por lo menos recordará este año por haber sido el único jugador en ganar los dos títulos en juego, puesto que ya se había adjudicado la Copa Príncipe vistiendo la camiseta del Leche Río Breogán. Por cierto, ¿sabéis dónde está la red de uno de los aros de esa final jugada en el pabellón zaragozano? Pues sí, en casa de Rojas, quien actualmente no pasa un momento dulce ya que tuvo que viajar a su ciudad rápidamente por un problema de salud que ha sufrido su madre. Esperemos que se recupere pronto.
Más curiosidades. En las celebraciones tanto en el autobús como en la plaza de España además de los jugadores había algún "extraño" que saludaba a los aficionados como si fuera un jugador más. Se trata de un amigo de los americanos del equipo, llamado Curtis, que se "coló" en los festejos y a quienes no conocen demasiado a los extranjeros del CAI les pasó totalmente inadvertido. Hasta salió en fotos publicadas en la prensa...
El caso de Howard Brown es de analizar. Para empezar su hijo llegó con un pan debajo del brazo, o mejor dicho con el ascenso bajo el brazo, puesto que nació un par de días antes del partido decisivo. Dawson se llama la criatura. Todo bien y todo felicidad. Hasta una semana después de alcanzar la ACB, puesto que la mujer del americano sufrió un cólico y tuvo que ausentarse de algunos actos por estar con su esposa.
Una de esas obligaciones que ha tenido el club estos días fue la recepción en el Gobierno de Aragón por parte del presidente Marcelino Iglesias. Allí hubo intercambio de trofeos. Que si una réplica de la copa para tí, que si una distinción para el equipo. Lo curioso fue al acercarse a esa distinción y leer las letras en las que se daba la enhorabuena al "CAI Zaragoza CB". Un nuevo nombre. Ya que ni se refería al antiguo CBZ ni al actual Basket Zaragoza 2002.
Ha pasado de todo. Ahora llegan días tranquilos aunque en breve tocará hablar de fichajes. Lo haremos.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Dile a tu amigo Alberto Chapuli que te diga pronto a quien vamos a fichar que queremos saberlo

Anónimo dijo...

"amigo", bueno, bueno. Sr. Cosco, tiene Vd. un problema de "autoestima emocional"y complejos varios. SOLUCIONALOS y entonces puedes empezar a tener amigos.

Anónimo dijo...

con el fin de la temporada se despide este blog hasta septiembre?

Anónimo dijo...

Actualizaras algun dia? Estamos impacientes...

Anónimo dijo...

Si no vas a actualizar el blog, ¿por qué no borras el acceso?

Juan Royo Abenia dijo...

oye ¿por qué no juega ivan garcia? el tio es un figura, dos minutos que juega dos triples que se casca el tio ¡¡y lo mete!!

fantasy fiction dijo...

com Un ascension is a book that takes you through the journey of a young woman who has just lost her mother to cancer. This young woman, not knowing what to do with herself, spends the days in a long, empty house by herself. She then meets a stranger who seems to know her mother, who she starts to think might have been a part of her life, but not quite. This stranger starts to tell her the story of her life and how her mother is connected to it. This story is told in two different perspectives, one being the young woman's perspective and one being the story told by the stranger. The two stories intertwine and come together to show how everything is connected and how it's possible for things to be different if we just change our perspective.