22 de noviembre de 2007

Al mal tiempo, buena cara


Como era de esperar, Santiago de Compostela ha recibido al CAI con el cielo encapotado y una ligera lluvia. Normal. Pero como dice el refrán, "al mal tiempo, buena cara". Y lo cierto es que la expedición rojilla se bajaba del autobús con rostros de cansancio, pero con sonrisas propias del buen rollo que existe en el grupo.

Nada más y nada menos que diez horas y media de viaje para llegar a tierras gallegas y poder descansar un poco. Y es que los zaragozanos no consiguieron hora de entrenamiento en el pabellón del Rosalía hasta mañana por la mañana. Por eso, y con buen criterio, se ha decidido que poco después de llegar al hotel la plantilla al completo saliera a dar un paseo por las calles de Santiago y realizara unos pocos estiramientos para contrarrestar la incomodidad del viaje.

Así, bien abrigados, los chicos de Segura salieron a caminar y a hacer hambre, porque de vuelta les esperaba empanada gallega y el típico pulpo a feira.

Por cierto, en el autobús no iba David Doblas. Es broma.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Y el avión para que está pues? Solo para los partidos contra los Memphis?