Muy buen ambiente en los entrenamientos

Las victorias sientan bien y eso se deja notar hasta en el ambiente que se respira en los entrenamientos del CAI. Risas, bromas, piques... todo dentro de la seriedad propia de una sesión de trabajo. Lo cierto es que a los jugadores se les ve disfrutar con lo que hacen y eso es muy importante para seguir por el camino de los éxitos.
Una prueba evidente fue el entrenamiento de ayer por la mañana. Después de pasar por el gimnasio, un poquito de tiro en un ambiente distendido. Luego, ejercicios más específicos de dos contra uno o de cuatro contra cero en los que los rojillos mostraron cómo son. DP hacía continuos comentarios y pegaba gritos, además d emostrarse muy duro en defensa. Eso contagió a un Matías Lescano que empezó a meter la mano con fuerza. Mientras, Victoriano se reía tras no poder culminar una acción en la que se había ido de sus defensores. Y todo con continuos reconocimientos a las jugadas bien finalizadas o, entre bromas, a los grandes pases del segundo entrenador Joaquín Ruiz Lorente (no en vano fuen un buen base).
Y al acabar, unos a la ducha, otros a atender a los medios de comunicación y otros se retaban con lanzamientos desde el medio campo. Desde luego, el CAI respira optimismo y un ambiente muy positivo de cara a lo que viene.

Me preocupa Howard Brown

En plena racha positiva de resultados me gustaría exponer algo que me tiene algo preocupado, y no es otra cosa que el estado tanto de forma como anímico de Howard Brown. Personalmente me parece un gran jugador, ya que le he visto partidos increíbles vistiendo la elástica del León, el Plasencia o el Murcia. Pero en Zaragoza se ha atascado. Ya no es ese jugador que anotaba con facilidad, que hacía disfrutar a los aficionados y que podía echarse un equipo a la espalda. En entrenamientos y partidos se ve que lo intenta, pero las cosas no le salen.
Durante la pretemporada él me reconocía en una entrevista que en el CAI no se había visto al verdadero Howard Brown. Y tenía razón, pero sus deseos de que todo eso cambiara no se han cumplido. Le falta chispa, acierto, rapidez... Lo cierto es que no está bien, y sus números lo dejan bien claro (3,5 puntos, menos de 3 rebotes y más de una pérdida por partido).
Quizá lo peor sea lo que le pueda rondar por la cabeza, ya que en los últimos desplazamientos se le ha visto más cabizbajo y "tristón" que de costumbre. A lo mejor es impresión mía, no lo sé. Los fallos en partidos como el de Burgos -en el que hizo un mate para ponerse en pie- o en entrenamientos previos le enfadan, y lo vuelve a intentar una y otra vez pero sin fortuna. Y es que lo que necesita Howard es un par de buenos partidos, en los que se sienta importante. Con él bien, el CAI tendrá un perímetro de lujo.
Ánimo.

Jugando así se deberían ganar muchos

Está claro que no ha sido un partido brillante el que ha jugado el CAI en Burgos, pero ha sido de esos encuentros que demuestran que cuando se hacen bien las cosas se gana y con holgura. A mí me ha quedado muy claro que jugando de esta manera se lograrán muchas más alegrías.
Lo de jugar bonito, el espectáculo, el brillo está muy bien, pero hay momentos en los que lo importante es ganar y mostrarte sólido, y eso lo han hecho los zaragozanos a la perfección. Poco a poco, sin prisa, minando al rival con paciencia, el CAI ha logrado una victoria más que importante en Burgos. No quiero ni pensar lo que hubiera ocurrido si se tropieza ante el Autocid Ford.
Además de ese buen trabajo y esa concentración de principio a fin, creo que merecen una mención especial los jóvenes. Curro Segura ha confiado en Iván García y en Cresnar y estos le han respondido bien. Sé que no son hombres que vayan a ganar partidos pero yo soy de los que piensa que deben tener sus minutos. La liga es muy larga y muchas veces las rotaciones resultan más fundamentales de lo que parecen.

Mañana de paseo y compras gastronómicas

Con el trabajo realizado y a la espera de completarlo esta noche en el encuentro ante el Ford Burgos, el CAI ha tenido una merecida mañana de descanso. Hay muchas maneras de disfrutar de esas horas, pero la mayoría de los expedicionarios, sobre todo, el cuerpo técnico han aprovechado para dar un paseo por una ciudad tan entrañable como esta y para hacer unas compritas, como no, gastronómicas.

Quien no ha oido hablar de la morcilla de Burgos o de la enorme variedad de embutidos que ofrecen en sus restaurantes y comercios. Pues aprovechando el viaje lo lógico es que la gente piense en llevar provisiones a casa pensando en un aperitivo a celebrar cualquier día de estos. Los productos lo merecen y la oportunidad también.

Mientras los técnicos compraban esos ricos manjares algunos jugadores empleaban su tiempo en quedar con viejos conocidos o amigos. También hubo otros que salieron en solitario a dar una vuelta y los más comodones prefirieron quedarse en el hotel de concentración. Todo sea para que esta noche se pueda celebrar un triunfo.

Viaje, frío, reencuentros y a entrenar

El CAI (y un servidor) ya estamos en Burgos y aquí nos hemos dado cuenta de que el invierno se acerca. Después de un viaje bastante cómodo por carretera la capital burgalesa ha recibido al equipo con una baja temperatura que ha permitido ver por primera vez a varios componentes del equipo con gorros de lana camino del pabellón de El Plantío.

Y esto ya parece un conjunto hecho y derecho con once jugadores, incluido Mike Higgins, con voluntad de saltar a la cancha y de lograr una nueva victoria. Pero para eso hay que esperar a mañana. Hoy lo que sí que se han producido han sido varios reencuentros. En un duelo con tantos argentinos era normal que a la salida del entrenamiento del Ford Burgos y la entrada de los rojillos se produjeran los típicos corrillos. Lescano y Victoriano hablando con Lo Grippo, Quinteros junto a Martín Leiva y Diego García. Una breve charla, bromas y antrenar.

Reconozco que el encuentro que más me ha hecho pensar ha sido el de dos grandes tipos: Óscar González y José Ramón Esmoris. Ambos coincidieron de rojillos en otra época, concretamente, jugando el "play off" de Granada y siguen manteniendo una muy buena relación. Parece que fue ayer y, sin embargo, fíjate la de vueltas que han dado uno y otro.

Luego, lo típico. Una suave sesión de estiramientos, tiro y cuatros contra cuatro para entonar el cuerpo de cara a mañana. Por cierto, vaya susto el que ha dado Quinteros que poco antes de terminar el entrenamiento ha notado un dolor en la espalda por una mala postura. Afortunadamente ha podido seguir y no parece que le vaya a impedir jugar ante el Burgos.

Una cifra contradictoria

El club acaba de hacer oficial que está a punto de llegar a los 10.000 abonados. Increíble. Ya quisieran esa masa social casi todos los equipos de ACB y del resto de Europa. Pero con el dato en la mano yo lanzo una reflexión y una pregunta. ¿Por qué todo el mundo juega tan cómodo en Zaragoza?
Los equipos de la LEB quieren venir a jugar contra el CAI, es algo que les motiva. El pabellón es de los cómodos para jugar, el rival es de los que les hace sacar lo mejor que llevan dentro y suelen apelar a que si las cosas van bien para ellos la afición suele o callarse o ponerse en contra de los suyos.
Eso es lo que piensan equipos y jugadores de la LEB, y lo sé porque muchos de ellos lo comentan abiertamente. Sé que es un tema espinoso, pero yo he vivido situaciones en las que 3.000 personas mal contadas presionaban mucho más que el Príncipe Felipe al completo (recuerdo el "play off" en Plasencia) e incluso aficiones más críticas, como la del Breogán, cómo llevaba a los suyos en volandas para remontar un partido.
Todo esto lo digo porque si esos 10.000 abonados pusieran un poquito de su parte cada uno el CAI tendría totalmente de cara 17 partidos de liga cada año. De acuerdo que la grada es soberana, paga su entrada y puede expresarse como quiera (no quiero criticar la actitud de nadie), pero con miles de almas de tu lado se hace todo más fácil.
Me gustaría ver qué pasaba con un pabellón volcado de principio a fin independientemente del rival o de la jornada que se juegue. Seguro que el premio hubiera llegado ya.

Ya están todos

Parece increíble, pero ha tenido que pasar la pretemporada completa y cinco jornadas de liga para que Curro Segura cuente con la plantilla al completo. Lesiones, viajes, selecciones... todo ha impedido hasta ahora que el CAI contara con todas sus piezas. Por fin están todos. Mike Higgins viajará a Burgos junto a sus compañeros, aunque aún se desconoce si jugará, y Lucas Victoriano se incorpora al trabajo esta tarde después de guardar reposo desde el sábado por el golpe que sufrió en la rodilla en el partido ante el Ciudad de Huelva.
Ahora es el momento en el que al equipo hay que exigirle el máximo. Con esto no quiero decir que hasta hoy el CAI no pudiera rendir a un buen nivel sino que es lógico que si te falta alguien no alcances tu juego idóneo. Los entrenamientos de calidad, las rotaciones o el descanso de hombres importantes son fundamentales a lo largo de la temporada y eso se va a lograr desde ya.
Todos nos quedamos sorprendidos al ver a Higgins hacer la rueda el pasado viernes. Su recuperación ha ido por buen camino y ya se ejercita con el grupo. Él quiere jugar en Burgos, aunque parece que el técnico no las tiene todas consigo. Normal. No quiere correr. Y es que las prisas son malas consejeras, sobre todo, cuando hablamos de un jugador de 40 años. Aún así, una gran noticia la vuelta de Mike.
Y qué decir de Lucas, el "pupas" del grupo, ya que se lleva todos los golpes inoportunos en los partidos. Un día es el dedo, otro la rodilla (como en La Palma) y ante el Ciudad de Huelva otra vez la misma rodilla. Parece que no ha sido nada importante y que esta tarde ya se entrenará con normalidad.
Por fin el CAI parecerá un gran equipo en los desplazamientos, no como hasta ahora que en algunos de ellos había solo nueve jugadores, vamos como un grupo de amigos (sin ánimo de molestar).

El triunfo de la tranquilidad

No se le puede denominar de otra manera. El triunfo que logró anoche el CAI ante el Ciudad de Huelva es el de la calma, el de la tranquilidad, el que le permite respirar durante los próximos días. El equipo jugó bien a ratos, pero sobre todo hizo olvidar en muchos momentos la mala imagen ofrecida el domingo pasado.
Llegar a la cuarta jornada con un balance de 2-2 era un enorme riesgo para los de Curro Segura, quien por cierto recibió algún pitidito al principio. Perder hubiera supuesto encender las alarmas, el que la afición perdiera su confianza en el equipo y que todo el mundo dudara de este proyecto. Pero no, el CAI sigue demostrando semana a semana que si defiende duro es muy difícil el batirle.
Con algunos minutos de mucha intensidad ante un rival muy acertado (ojo al porcentaje de acierto desde el triple de los andaluces) y sabiendo mantener la calma en situaciones decisivas, el equipo aragonés logra romper su mala racha y se coloca con tres victorias en su casillero.
Para mí, lo mejor es que se han recuperado jugadores para la causa. Especialmente Lescano, que volvió a brillar y a tirar del carro con defensas agresivas y robos de balón. Brown ya se siente algo útil, Iván García y Cresnar tuvieron algún minuto, Victor empieza a estar como pez en el agua...
Volvieron las buenas sensaciones. Sólo falta que esto tenga continuidad

La vuelta de Ugonna

Cada año cuando un ex jugador del CAI vuelve al Príncipe Felipe como visitante los aficionados (y me incluyo) nos tememos lo peor. "Seguro que hace un partidazo", "hoy lo va a enchufar todo"... son algunas de las frases repetidas en la previa del partido. Unas veces ocurre eso, la mayoría no. Pero hoy, día en que vuelve a Zaragoza Ugonna Onyekwe es muy probable que el nigeriano brille todo lo que no lo pudo hacer con el CAI.
El pívot ha vuelto a Huelva, que ya fue su casa hace un par de temporadas, y allí está volviendo a ser el que era. Simplemente Ugonna Onyekwe y no un calco de Jorge Garbajosa que es lo que le pedía Chus Mateo en sus primeras apariciones la campaña pasada.
Ha vuelto a jugar por dentro (sólo ha lanzado dos triples en cuatro partidos), de nuevo hace daño a las defensas rivales y sus números le convierten en el referente de los andaluces. Todo eso unido a que su lesión de rodilla parece ya olvidada -hoy veremos si sigue cojeando o no- hacen de su vuelta al Príncipe Felipe una de las más temibles del año.

Que nadie se olvide del Mann Filter

Ya sé que este blog es sobre el CAI Zaragoza, pero de vez en cuando me gustaría hablar de otros asuntos del baloncesto y de otros equipos aragoneses. Hoy mi intención es recordarle a todos los aficionados que el Mann Filter Zaragoza, conjunto de Liga Femenina (máxima categoría nacional) está a poco más de una semana de comenzar su liga y que los seguidores al baloncesto deben apoyar a este grupo que dirige Joan Albert Cuadrat.
Muchas veces caen en el olvido, pero hay que destacar el mérito que tiene ese club año a año. Esta temporada volverá a tener una plantilla justita, con muchas jugadoras jóvenes (con los riesgos que eso supone) y, además, jugarán en el pabellón del Siglo XXI, un recinto más acogedor que el grandioso Príncipe Felipe, pero que pilla un poco a desmano.
Todos los años cuesta confeccionar una plantilla competitiva, ya que los recursos económicos no abundan, pero el esfuerzo y el trabajo de este grupo de hombres y mujeres es innegable y creo que la afición zaragozana debe echarles un cable.
Este domingo juegan su último amistoso de pretemporada y la semana próxima empiezan la liga. Desde aquí quiero desearles lo mejor en la campaña que comienza y, sobre todo, pedir que nadie se olvide del Mann Filter. Mucha suerte chicas.

Las palabras contra Starosta no se las lleva el viento

No quiero que nadie piense que con esto quiero cargar las tintas contra Curro Segura ni que pretendo hacer leña del árbol caído, pero creo que el técnico del CAI no estuvo acertado en su comparecencia en la sala de prensa el pasado domingo al personalizar la derrota en Ondrej Starosta. Personalmente me pareció un gesto feo y a todas luces injusto y por eso he decidido tratar el tema y conocer vuestras opiniones.
Decir que el checo fue más "un lastre que un apoyo" ante el Leche Río Breogán me parece una afirmación tan sumamente dura que nos soprendió a todos los que allí estábamos, pero no por eso hay que dejar de analizarla.
Para empezar, creo que el equipo jugó mal, regaló 20 minutos y no supo hacerse fuerte en su pabellón, lo cual es una obligación en esta liga. Pero de ahí a decir que cuando Starosta estaba en cancha "siempre nos hacían canasta y si estaba en el banquillo no ocurría" va un mundo. El pívot estuvo flojito, le faltó rabia, agresividad en defensa, contundencia en el rebote y hasta acierto en el tiro, pero no estuvo ni mejor ni peor que la mayoría de sus compañeros.
Además, me parece más injusto todavía que Curro cargue contra Ondrej después de partidos importantes. Y es que, por si no lo sabíais, ya comentó tras el quinto encuentro del "play off" de León que Starosta no había estado en el partido. Vaya excusa.
Decir todo eso de un hombre al que le das los tres primeros balones de ataque y saca tres faltas, y que acaba con 9 puntos y 11 rebotes me resulta indignante, sobre todo, porque tú mismo estás minando la moral de una de tus mejores armas. Había que ver la cara del bueno de Ondrej cuando se enteró de lo que acababa de decir su entrenador. No daba crédito y salió del paso como pudo. Normal.
Quizá el jugador necesite un rapapolvo para que se muestre más duro sobre la cancha, pero no creo que esta sea la forma adecuada. Insisto, creo que Segura se equivoca con esas declaraciones y, sobre todo, me parece que no le hacen ningún bien al grupo.

Se puede perder, pero así no

El CAI sufrió una nueva derrota ante el Leche Río Breogán. Es la segunda consecutiva y su marcador de éxitos y fracasos se coloca en un preocupante 2-2. Pero lo peor del encuentro de esta jornada no es la derrota, ya que ante un rival así puede producirse, sino la forma en que llegó.
El equipo zaragozano regaló la primera parte a los gallegos. En esta liga si quieres ser el primero, ese que asciende directamente, no puedes poner los partidos en bandeja al rival, y eso es lo que hicieron los rojillos ante el Breogán. Salieron lentos, sin intensidad, casi se podría decir que relajados, y de repente se dieron cuenta de que iban 23 abajo. Esa renta no es fácil remontarla, pero el CAI demostró que si quiere es un conjunto temible. Remontó, empató el partido a tres minutos del final, pero no supo amarrar el triunfo.
En el tramo decisivo el Leche Río estuvo más acertado y se llevó el partido. Sí, pero los errores del inicio ahí están y se pagaron muy, pero que muy caros. Una nueva desilusión para los seguidores rojillos, un nuevo varapalo que empieza a parecer lo de otras temporadas. Esperemos que no sea así y que de los errores se aprenda. Pero rápido, porque esto no para y ya hay algún equipo que está imponiendo su ley en la liga.

Tarde de toros, Festival del Vino y algún concierto. Poco más

¿Qué hacen los jugadores y cuerpo técnico del CAI durante las Fiestas del Pilar? Desde luego nada de excesos, ya que ante un partido tan importante como el de mañana ante el Leche Río Breogán nadie puede despistarse. Pero es cierto que la oferta cultural que ofrece estos días la ciudad permite a los protagonistas hacer cosas distintas en sus ratos libres. Así, algunos aprovecharon una de las jornadas libres para ir a los toros, otros visitaron el Festival Internacional del Vino e incluso se pudo ver a algún jugador en el concierto de Coti, por ejemplo. Eso si, a horas prudenciales.
La plantilla está concentrada en el encuentro y ha trabajado casi toda la semana, pero es inevitable que haya habido las típicas cenas con amigos o familiares, y las salidas a tomar una tapita o a asistir a algún espectáculo.
Así, un gran amante de los toros, como es Lucas Victoriano, asistió junto a algún compañero a la corrida del jueves en la que saltaron al ruedo Finito de Córdoba, el Juli y el Fandi. Otros, prefirieron el dar una vuelta por el Festival del Vino, situado en la Feria de Zaragoza, para degustar (sólo catar) los caldos aragoneses y de otros lugares.
No se podía trasnochar, así que los jugadores han asistido a algún concierto que no era muy tarde, como el de Coti, en el paseo Independencia, al que asistieron Matías Lescano, Óscar González, el propio Victoriano, Paolo Quinteros y sus respectivas parejas, además de Iván García. Y lo pudieron contemplar de muy cerca, ya que fueron invitados a la zona VIP, ubicada tras el escenario.
Eso sí, todo eso ya pasó y las mentes ya están puestas al cien por cien en derrotar al Leche Río.

José, uno más en los viajes por carretera

Hay personas que forman parte de este CAI Zaragoza que no son conocidas por el público. Uno de ellos, y uno de los más importantes en los desplazamientos del equipo, es José el conductor del autobús de los rojillos. Él es el que lleva y trae sanos y salvos a los chicos del CAI y, además, siempre con una sonrisa y una cara amable. Un gran tipo este José.

No lo digo porque yo haya compartido con él algún que otro café, incluso comidas, pero el chófer del conjunto aragonés hace más agradable los viajes a la expedición zaragozana. Su optimismo, su sentido del humor y su profesionalidad hacen que José sea uno más en los viajes por carretera.

Los jugadores le tienen mucho cariño y le llaman “Bruce”. Dicen que el apodo se lo puso Matías (Lescano) al verlo en el gimnasio y comprobar que el tío está en forma. Sea como fuere, es otra muestra de que José es una pieza importante en el grupo. El único deseo, y él yo sé que lo comparte, es que los conduzca a la ACB.

Una semana “distinta” a causa de las Fiestas

El CAI está viviendo una semana que es lo menos parecido a su rutina habitual. Las Fiestas del Pilar han trastocado los planes del equipo de Curro Segura y las sesiones en la pista auxiliar, un día de fiesta entre semana o disputar el partido en domingo son algunos de los cambios más significativos.
En otras ocasiones los rojillos se iban de gira durante el Pilar. Ahora recuerdo un año en el que jugaron hasta tres partidos seguidos fuera de casa (Cáceres, León y Plasencia). Sin embargo este año el calendario ha fijado un encuentro en el Príncipe Felipe en estas fechas de octubre. Para empezar, se modificó el día del partido y se colocó el domingo, pero además, el CAI ha sufrido los típicos inconvenientes de los festejos. Que si trial indoor, que si concierto de Rod Stewart… Así, los rojillos descansaron el pasado fin de semana, se ejercitaron lunes y martes en la pista auxiliar, hoy parece que han vuelto a la central, mañana será día de fiesta y el viernes la vuelta al trabajo.
Mucho vaivén y mucho cambio, aunque sólo cabe esperar que no les afecte. Aún así, la batalla del domingo será pareja, ya que las casualidades del destino han querido que se enfrenten a otro equipo con una ciudad en fiestas, ya que Lugo celebra estos días San Froilán.

Rosalía, la gran sorpresa

Es un recién ascendido a la LEB Oro, pero está siendo la mayor sorpresa después de tres jornadas de competición. El Beirasar Rosalía encabeza la clasificación junto al Alicante Costa Blanca y al Hospitalet, después de haber ganado los tres partidos que ha disputado (y dos de ellos a domicilio).
El equipo gallego, con una plantilla a priori justita, y algunos jugadores totalmente desconocidos ha sido capaz de vencer en las canchas de Los Barrios e Inca, además de ganar en casa al Melilla. Así, se mantiene invicto y parece un ejemplo a seguir para los conjuntos modestos.
Esa posición del Rosalía debería producir cierta alegría entre los aficionados aragoneses, ya que en sus filas está uno de los pocos jugadores de nuestra tierra, Rogelio Legasa, quien comparte vestuario con un ex del CAI Huesca, el pívot Miguel Ángel Montañana.

Allí estuvieron los Inchas Lleons

No quiero olvidarme de un aspecto fundamental en este CAI Zaragoza, de los valientes aficionados que acompañan al equipo en algunos de los partidos que juegan lejos de la capital del Ebro. En San Sebastián estuvieron entre 20 y 30 aficionados de la peña Inchas Lleons, quienes animaron a los suyos desde antes de comenzar el choque.
Muchas veces ocurre que bien por falta de espacio, por la trascendencia de lo que ha ocurrido en el partido o simplemente por un olvido de un servidor no aparece reflejado en las páginas de Heraldo la presencia de esos seguidores en distintos pabellones de la LEB. Por eso, aprovecho esta tribuna para comentarlo y destacarlo. Y es que tiene mérito el organizar un viaje y meterte un montón de horas de autobús sólo por amor a unos colores.

El CAI se ahoga en San Sebastián

Una noche para olvidar la del CAI en tierras guipuzcoanas. No sólo por la derrota que ha sufrido en la cancha del Bruesa sino por todo lo que le ha ocurrido a lo largo de la tarde.

Para empezar y cuando la expedición se disponía a partir hacia la plaza de toros de Illumbe se averió el autobús del equipo. Paree que ser que falló la bomba de la gasolina, como a los propios jugadores que tras el descanso dejó de bombear el combustible y regalaron el triunfo a los vascos.

Así, todo el grupo tuvo que ir al recinto tanto en taxis como en coches particulares. Pero eso no acabó allí. Nada más comenzar a calentar, una caprichosa gotera comenzó a mojar el parquet justo donde se ejercitaba el CAI. Más inconvenientes.

Con todas esas circunstancias casi resulta normal que los rojillos se ahogaran en su visita a San Sebastián.

Fuera de bromas, una pena ya que se tiró un partido que se tenía ganado.

Un poco de tiro en un ambiente distendido

Que el CAI se juegue algo muy serio no quita para que el grupo, una vez terminado su trabajo, pueda relajarse con bromas en un ambiente distendido. Y la mañana de hoy era propicia para algunas de ellas, ya que el equipo de Segura se ejercitó en la cancha del Bruesa, que como casi todo el mundo sabe es una plaza de toros.

Bueno, primero los jugadores tomaron contacto con la pista. No la conocían, ya que el conjunto vasco la estrenó la temporada pasada en la ACB. Una sesión de tiro para adaptarse al parquet, a los aros y al tremendo eco que tiene el recinto taurino-deportivo.Divididos en grupos los jugadores rojillos realizaron distintos ejercicios de lanzamiento para concluir la sesión con unos estiramientos. Todo correcto, el grupo unido y la vista puesta en lograr esta noche un importante triunfo.

Eso sí, el camino de la cancha al autobús invitó a las risas entre los expedicionarios. Claro, no todos los días se está junto a las tablas de una plaza de toros y dentro de un burladero. El buen humor que hay en este CAI salió a relucir cuando el segundo entrenador Joaquín Ruiz, el delegado Isaac López y el capitán Matías Lescano se protegieron del improvisado toro que escenificó Óscar González. La foto, desde luego, es para enmarcar.

Qué mejor manera que regresar al hotel con una sonrisa. Lo serio ya vendrá esta noche.

Un reencuentro cariñoso

La llegada del CAI Zaragoza a San Sebastián ha traído consigo un reencuentro cariñoso entre la expedición aragonesa y ex jugadores del conjunto rojillo. Poco después de entrar al Hotel Palacio de Aiete su puerta principal vivió los saludos y los abrazos tanto de Vitor Faverani como de Oliver Arteaga con sus ex compañeros.

De la época del pívot canario sólo queda el capitán Matías Lescano, con quien le une una buena amistad. Allí estuvieron charlando un rato y poniéndose al día. Ayer no había rivales, hoy será otra cosa.

Mientras, el brasileño saludaba a distintos componentes del CAI. A Iván García, a Lucas Victoriano, al segundo entrenador Joaquín Ruiz... y, sobre todo, al checo Ondrej Starosta, con quien se lleva muy muy bien.

Una noche de reencuentros la de ayer, reencuentros cariñosos. Otra cosa será lo que se vea mañana por la noche en la plaza de toros de Illumbe, aunque las buenas amistades no hay partido que las rompa.

Una cancha desconocida hasta el mismo viernes

Finalmente el CAI no pisará la cancha de la plaza de toros de Illumbe hasta la mañana del viernes, día de partido. El club tenía previsto que el equipo viajara mañana por la mañana en dirección a San Sebastián y se ejercitara allí por la tarde. Pero no ha podido ser. Al parecer no tenían hora disponible en la pista donostiarra así que el cuadro de Curro Segura cambia sus planes.

Lo que hará el CAI será entrenar mañana por la mañana en su pabellón y salir en dirección a La Bella Easo por carretera a eso de las cinco de la tarde. Eso sí, la mañana del día del partido los rojillos harán la típica sesión de tiro para hacerse un poco al parquet y a las canastas, puesto que esta cancha la estrenó el Bruesa el año pasado en la ACB y el CAI no la conoce.

Lo curioso del caso es que haya problemas de horas en el recinto vasco, porque donde sí que hay dificultades de espacios esots días es en el Príncipe Felipe, con motivo de las Fiestas del Pilar. Tanto es así, que la comparecencia de mañana de Curro Segura ante los medios de comunicaciónno será ni en la cancha, ocupada con los preparativos del trial indoor; ni en la sala de prensa, que tampoco está libre. Lo de siempre, mejor alejarse de Zaragoza durante las fiestas para evitar las incomodidades.

El mercado está que arde

Nadie quiere quedarse atrás en este LEB Oro y aunque ya se han disputado dos jornadas los fichajes no paran de producirse. Refuerzos, sustitutos temporales, viejos conocidos… El mercado está que arde.

En los últimos días varios han sido los equipos que han contratado diferentes jugadores. Así, el alero Danny Miller llega a La Palma, el mítico Chuck Kornegay ha fichado por el Palma Aqua Mágica para sustituir al lesionado Martín Nogués. Lo mismo ha ocurrido en Inca con el lituano Marciulionis que cubre la baja por hepatitis de Joan Riera. Además, el ex rojillo Maraker será el sustituto de Bill Phillips en el Plus Pujol, que también ha contratado a un base, Brian Jones; mientras que el Rosalía tiene a prueba a Jerome Beasley. Y más que se producirán.

Muchos nervios se detectan en este comienzo de temporada. Mientras, el CAI sigue tranquilo, con una plantilla más bien corta y sin preocuparle en exceso la ausencia de Mike Higgins. No deja de ser una gran señal.

El que sí que asusta es Andy Panko

El CAI Zaragoza ha metido algo de miedo en el cuerpo de sus rivales con sus dos buenas actuaciones para empezar la liga. Pero, con todos mis respetos, el que sí que asusta en este inicio de la LEB Oro es Andy Panko, jugador del Bruesa, al que se enfrentan los rojillos este viernes. Este ala-pívot estadounidense, de 2,03 metros de estatura, ha promediado en estas dos jornadas 40 minutos de juego (jugaron dos prórrogas ante el Breogán), 28,5 puntos, 11,5 rebotes, 6,5 faltas recibidas y 35,5 de valoración. Increíble.

De hecho, el jugador lidera las clasificaciones individuales de anotación, rebotes totales, minutos jugados y valoración. Sus porcentajes de acierto son elevados y su capacidad tanto por fuera como por dentro hacen de su supuesto duelo con Cuthbert Victor uno de los más apasionantes en el choque que se disputará en San Sebastián.